LECCIÓN 55 SEXTO REPASO


RECORDEMOS SER EL SANTO HIJO DE DIOS SIEMPRE!!!

Estoy decidido a ver las cosas de otra manera
Lo que ahora veo no son sino signos de enfermedad, desastre y muerte. Esto no puede ser lo que Dios  creó para Su Hijo bien amado. El hecho en si de que vea tales cosas demuestra que no entiendo a Dios. Por lo tanto, tampoco entiendo a Su Hijo. Lo que veo me muestra que no sé quien soy. Estoy decidido a ver los testigos  de la verdad en mi, en vez de aquellos que me muestran una ilusión de mí mismo.

Lo que veo es una forma de venganza.
El mundo que veo no es de modo alguno la representación de pensamientos amorosos. Es un cuadro en el que todo se ve atacado por todo. Es cualquier  cosa menos un reflejo del Amor de Dios y del amor de Su Hijo. Son mis propios pensamientos de ataque los que dan lugar a este cuadro. Mis pensamientos amorosos me librarán de ésta percepción del mundo y me brindarán la paz  que  Dios dispuso que yo tuviese.

Puedo escaparme de este mundo renunciando a los pensamientos de ataque.

En esto, y solo en esto, radica la salvación. Si no albergase pensamientos de ataque no podría ver un mundo de ataque. A medida que el perdón permita que el amor retorne a mi conciencia, veré un mundo de paz, seguridad y dicha. Y esto es lo que elijo ver, en lugar de lo que ahora contemplo.

No percibo lo que más me conviene.
¿Cómo podría reconocer lo que más me conviene si no sé quién soy? Lo que yo creo que más me convendría no haría sino atarme aún más al mundo de las ilusiones. Estoy dispuesto a seguir al Guía que Dios me ha dado para descubrir  qué es lo que más me conviene, reconociendo que no puedo percibirlo por mi cuenta.

No sé cual es el propósito de nada.
Para mí, el propósito de todas las cosas es probar que las ilusiones que abrigo con respecto a mi mismo son reales. Para eso es para lo que trato de usar a todo el mundo y todas las cosas. Para eso es para lo que creo es el mundo. Por lo tanto, no reconozco su verdadero propósito.  El propósito que le he asignado ha dado lugar a una imagen aterradora del mismo. Quiero que mi mente se vuelva receptiva al verdadero propósito del mundo renunciando al que le he asignado, y descubrir la verdad acerca de él.

























Comentarios

Entradas populares de este blog

LECCION 108 Dar y recibir son en verdad lo mismo

Lección 102 Se feliz, pues tu única función aquí es la felicidad.

LECCION 22